dijous, de novembre 25, 2004
Fracaso exterior del soe: no son las formas; es la ideología
No paran las malas noticias para el partido del gobierno. Si no son los desatinos de Moratinos, son los del socialista Solana :
Y es claro que Solana no fue por su cuenta a esta reunión:
Una revelación que no ayuda nada al soe. A esto se suma la caracterización de Rodríguez como "presidente accidental" por el Wall Street Journal (información de EFE):
Bueno, uno podría decir, ¿qué esperaban los sociatas? Se cosecha lo que se siembra. Después de las encendidas proclamas antiamericanas, uno pensaría que se trata de un rumbo consciente de la política exterior socialista. Ahora resulta que no. Incluso periodistas que han venido echando leña al fuego como l'Eusebi ahora escriben:
¿Alianza transatlántica, Eusebi? ¡Quién te vio y quién te ve!
El director Jose Antich apunta a lo mismo.
¿Pero qué debe hacer? El problema es de ideología, no de formas, señor director.
Además, siguen echando leña al fuego con visitas como la de Chávez, campeón de los derechos humanos según Gadafy.
Nuestros aliados
Lo tienen todo mal enfocado. González entró en la OTAN, apoyó la guerra del Golfo, trajo bases americanas a territorio espanyol, hizo reformas de mercado, y sobre todo no tuvo ese inflamado discurso antiamericano tipo pancarta del que Rodríguez hace gala. Esa fue "la anterior generación de dirigentes socialistas", señor Antich. Esa generación pasó a la historia y es ahora una excrecencia, no por sus posturas de política exterior, sino por la corrupción y por su relación con escuadrones de la muerte. Esa generación es de lo más impresentable en estos momentos: Bono, Moratinos, Ibarra, etc., etc. No es un tema de saber explicar la postura. Es la postura en sí la que está fracasando. No lo ven y no lo quieren ver. Tomará tiempo. Ojalá que el artículo del WSJ contribuya en algo a erosionar su ensimismamiento.
Actualización: Lluís Foix es algo más acertado:
|
Solana reconoce haberse entrevistado en secreto con Hamas
La organización palestina figura en la lista de grupos calificados como terroristas tanto por la UE como por EE.UU.
LVD - 25/11/2004 - 10.34 horas
Y es claro que Solana no fue por su cuenta a esta reunión:
Pese al carácter secreto de la entrevista, Solana aseguró en declaraciones a esa emisora [la BBC] que quienes debían estar al tanto de la misma habían sido debidamente informados.
Una revelación que no ayuda nada al soe. A esto se suma la caracterización de Rodríguez como "presidente accidental" por el Wall Street Journal (información de EFE):
El diario recuerda que Rodríguez Zapatero dijo en septiembre a la revista "Time" que "no quiero ser un gran líder" y afirma que, teniendo en cuenta esa frase, estos nueve meses deben ser considerados "un éxito rotundo".
A juicio del periódico dejó su impronta con la decisión de retirar a las tropas de Irak, anunciada antes de ganar las alecciones, adoptada "precipitadamente" y que fue el perfecto "gracias" a los terroristas que atacaron Madrid el 11 de marzo.
Asimismo, señala que "contrariamente a las quejas socialistas de que los anteriores Gobiernos expusieron a España al terrorismo, ahora sabemos que los ataques a Madrid fueron planeados mucho antes de la guerra de Irak".
La salida, que costó a España "amigos e influencia exterior", no llevó más seguridad a casa y España sigue siendo un "objetivo" y una "base para la red global de Osama" Bin Laden.
Las "implacables ráfagas" de antiamericanismo de Zapatero "hacen estremecer incluso a los diplomáticos franceses y alemanes".
"Dos veces ha instado a los aliados de EEUU a que abandonen Irak. Y de alguna manera todavía esperaba que el presidente George W. Bush le devolviera sus llamadas".
"Sería tentador negar la importancia de las meteduras de pata de un presidente inexperto que finalmente llegue a ser más sabio", afirma el diario, que considera que la política de Zapatero "parece no estar tan conducida por la inexperiencia como por la ideología", lo que es "difícil de cambiar".
Por ello, apunta el diario, "esta visión del mundo ayuda a explicar sus afinidades por los últimos bastiones que quedan del socialismo en Latinoamérica".
En este sentido, destaca la labor de presión que está realizando sobre la UE para conseguir que se levanten las sanciones a Cuba, "ostensiblemente para alentar las reformas en esa isla totalitaria", postura bienvenida por los disidentes cubanos.
Otro de los proyectos de Zapatero es fortalecer los lazos de España con el presidente venezolano, Hugo Chávez, quien en una visita a Madrid esta semana destacó que la "química" entre ambos habían sido "muy, muy buenas".
Incluso, subraya el periódico, el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Angel Moratinos, respaldó la acusación de Chávez de que el anterior Gobierno conservador español apoyó un intento de golpe de Estado en su contra, lo que ha provocado que los conservadores hayan solicitado su dimisión.
"Zapatero tiene derecho a tener sus ideas", pero "el pueblo español debería poder preguntar qué consiguen de un líder que apacigua a los terroristas, se hace amigo de los dictadores y acaba con la posición internacional de España", indica.
"Podrían ser cuatro largos y oscuros años en la península Ibérica", finaliza editorial.
Bueno, uno podría decir, ¿qué esperaban los sociatas? Se cosecha lo que se siembra. Después de las encendidas proclamas antiamericanas, uno pensaría que se trata de un rumbo consciente de la política exterior socialista. Ahora resulta que no. Incluso periodistas que han venido echando leña al fuego como l'Eusebi ahora escriben:
La necesaria cohabitación
A España no le conviene tener de espaldas al todopoderoso americano. Por eso desde la Moncloa se consideraba que el encuentro con los Reyes era un empujón que ha de allanar el camino.
EUSEBIO VAL - 25/11/2004
El rey Juan Carlos ha sido la figura providencial que la Administración Bush necesitaba para realizar el gesto de deshielo hacia España. A fin de cuentas, los gobiernos pasan pero la Corona encarna unos valores permanentes, de compromiso democrático y alianza transatlántica, que son el cimiento de la relación bilateral.
¿Alianza transatlántica, Eusebi? ¡Quién te vio y quién te ve!
El director Jose Antich apunta a lo mismo.
...han sido todos los gobiernos que ha habido en la democracia aliados importantes, excepto en la guerra de Iraq con el actual Ejecutivo. Esa historia en común debería ser un buen punto de partida para una nueva etapa que superara recelos y enemistades recíprocas.
La anterior generación de dirigentes socialistas fue capaz de tejer una buena relación con los diferentes presidentes de EE.UU., que nadie ha considerado nunca lesiva para los intereses de España. Ahora Zapatero debe hacer lo mismo. /em>
¿Pero qué debe hacer? El problema es de ideología, no de formas, señor director.
Además, siguen echando leña al fuego con visitas como la de Chávez, campeón de los derechos humanos según Gadafy.
Nuestros aliados
Lo tienen todo mal enfocado. González entró en la OTAN, apoyó la guerra del Golfo, trajo bases americanas a territorio espanyol, hizo reformas de mercado, y sobre todo no tuvo ese inflamado discurso antiamericano tipo pancarta del que Rodríguez hace gala. Esa fue "la anterior generación de dirigentes socialistas", señor Antich. Esa generación pasó a la historia y es ahora una excrecencia, no por sus posturas de política exterior, sino por la corrupción y por su relación con escuadrones de la muerte. Esa generación es de lo más impresentable en estos momentos: Bono, Moratinos, Ibarra, etc., etc. No es un tema de saber explicar la postura. Es la postura en sí la que está fracasando. No lo ven y no lo quieren ver. Tomará tiempo. Ojalá que el artículo del WSJ contribuya en algo a erosionar su ensimismamiento.
Actualización: Lluís Foix es algo más acertado:
Zapatero debe recapacitar. Y pensar en cómo resolvió Felipe González sus contenciosos con la administración Reagan a propósito de la continuidad de España en la OTAN. Fernando Morán abandonó la cartera de Exteriores y dio paso a Francisco Fernández Ordóñez que zurció todos los rotos de una izquierda sentimental que pensaba que lo suyo era estar en la oposición. Ahora está en el gobierno y tiene que recuperar el pulso de las relaciones exteriores y los intereses españoles.
|