Jordi Orwell - Barcelona CAT

Mientras la atención en el tema del terrorismo se centra en las relaciones entre el soe, el ceeneí y los terroristas, es decir, el juego político, perdemos de vista lo que ocurre con el prominente periodista de Al Yazira, Taysir Aluni. Leemos el artículo de Antonio Rubio de El Mundo (en El Periodista Digital)

El CNI siempre estaba ahí
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El autor de este artículo ha podido contabilizar, documentar y acreditar hasta un total de ocho infiltrados o colaboradores del CNI en las diferentes operaciones policiales que han tenido lugar en España desde el atentado del 11-S a las Torres Gemelas de Nueva York, en el año 2001. Los servicios secretos españoles siempre han tenido una determinada predilección por los agentes sirios porque, según ellos, tienen un nivel de preparación superior al de otros colaboradores árabes.

En la operación Dátil (noviembre de 2001), donde detuvieron a Imad Eddin Barakat Yarkas, Abu Dahdah, y Taysir Alony, entre otros, el CNI tuvo como infiltrado a un español de origen sirio y un detective privado.
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El primero de todos esos colaboradores o espías utilizados por el CNI en los últimos cinco años es un español de origen sirio, amigo de Abu Dahdah, presunto líder de los Soldados de Alá, y del periodista Taysir Alony. Tanto Dahdah como Alony son de origen sirio, están casados con españolas, fueron detenidos en noviembre de 2001 y septiembre de 2003, respectivamente, por el juez Baltasar Garzón, dentro de la llamada operación Dátil, y están acusados de formar parte o colaborar con el grupo radical que atentó en el 11-S.

Aloni está pringado hasta la médula. Sin embargo, sigue recibiendo apoyo por militantes del soe en altos cargos de gobierno.



Al Yazira y quienes le dan crédito, no se desmarca de Aluni. Por el contrario, le apoyan y promueven una campaña internacional para liberarle. Esta campaña ha incluído acciones de propaganda, en Madrid, apoyadas por Carlos Hernández, director de comunicación del soe. ¿Por qué?
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