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dilluns, de gener 02, 2006

Sobre cómo en Madrid se tergiversó un Estatut 

Érase una vez en el País Valenciano...

Después de la dictadura franquista el Consell Preautonòmic del País Valenciano adopta la senyera cuatribarrada con el emblema de la Generalitat Valenciana al medio. No hay franja azul. Es la senyera pre-blaverista.

No había azul y era Pais Valencià....

Los representantes valencianos redactan l'Estatut de Benicàssim que dice, entre otras cosas:
TÍTULO 1: LA COMUNIDAD VALENCIANA

Artículo 1º.
  1. El pueblo valenciano, cuya forma histórica de institucionalización política fue el Reino de Valencia, se constituye en Comunidad Autónoma de acuerdo con lo dispuesto en la Constitución y en el presente Estatuto, con la denominación del Pais Valenciano.
(...)

Artículo 5º.

La bandera del País Valenciano está compuesta por cuatro barras rojas sobre fondo amarillo, con franja azul junto al asta sobre la que se sitúa el escudo del Consell.

(...)

Artículo 7º.
  1. Las dos lenguas oficiales de la Comunidad Autónoma son el valenciano y el castellano. Todos tienen el derecho a conocerlas y usarlas.
  2. La Generalidad Valenciana garantizará el uso normal y oficial de las dos lenguas y adoptará las medidas necesarias para asegurar su conocimiento.
  3. Nadie podrá ser discriminado por razón de su lengua.
  4. Se otorgará especial protección y respeto a la recuperación del valenciano.
  5. La ley establecerá los criterios de aplicación de la lengua propia en la Administración y en la enseñanza.
  6. Mediante ley se delimitarán los territorios en los que predomine el uso de una y otra lengua, así como los que puedan exceptuarse de la enseñanza y del uso de la lengua propia de la Comunidad.

Adoptan senyera con franja azul, pero con escudo de la Generalitat.

Presentan l'Estatut al Congreso de los Diputados de Madrid y allí imponen la senyera orlada de coronas y les cambian el nombre oficial de País Valenciano por el de Comunidad Valenciana.

¿Y cómo lo hacen? La Unión de Centro Democrático (UCD), adalid del blaverismo, es un partido minoritario en el País Valenciano y no puede imponer sino parte de sus tesis en l'Estatut de Benicàssim (senyera coronada vs. senyera cuatribarrada, denominación de "valenciano" vs. "catalán", denominacion de "Reino de Valencia" vs. "País Valenciano). Sin embargo, tiene suficiente capacidad para bloquear la acción de los partidos mayoritarios. Cuando llevan l'Estatut al Congreso de Diputados, pues allí imponen todo lo que les falta, como la senyera, y sólo transan en la denominación de Comunidad Valenciana, ni siquiera País Valenciano.

Moralejas: Tenemos dos tergiversaciones.

1. De la historia. Tal vez muchos no sepan nada de todo esto y piensen que el valencianismo es y debe ser anticatalanista. Puej no. Así no es. Esa es sólo una instrumentación interesada de las derechas y, más aún, de las ultraderechas.

2. Del Estatuto. El poder en Espanya no va de abajo a arriba, sino de arriba a abajo. Desde el gobierno central se puede distorsionar la voluntad popular.

En ambos casos, a poner atención....



1. Senyera Valenciana vigente de 1979 a 1980
(quemada en el balcon del Ayuntamiento de Valencia por unos pocos ultraderechistas blaveros)




El Partido Socialista del País Valenciano no era blavero....

...como sí que lo era ....Franco.


2. Senyera Valenciana aprobada por l'Estatut de Benicàssim
El azul entra en la senyera.....


3. Senyera Valenciana impuesta desde el gobierno central por la UCD
No es que los valencianos hubieran votaron por esta senyera....
(Bueno, puej, posiblemente alguien diga que son "todos los espanyoles" los que deben decidir sobre la senyera del País Valenciano).


Joan Fuster i Ortells y Manuel Sanchis i Guarner. Refundadores del valencianismo, contrarios a las aberraciones anticatalanas, impulsadas e instrumentalizadas por los ultraderechistas locales.
Vale la pena leer Nosaltres els valencians de Joan Fuster...

Ambos sufren atentados con bomba. El "Grupo de Acción Valencianista" hace apología de estos atentados en su revista SOM. En 1997 unos delincuentes profanan la tumba de Joan Fuster. El refundador del valencianismo es presentado nada menos que como un "catalanista-imperialista" (ver aquí).

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